Hace tiempo que queria conocerlo y la verdad es mucho mas que un almuerzo al paso, tiene historia y mistica que lo cinvierte en una linda experiencia gastronómica. Sus platos que se deslizan por la barra, parecieran que vuelan, todo muy dinamico , organizado y rapido para disfrutar de los mejores sándwichs de Buenos Aires en plens city porteña . Me quede con ganas de probar mas y su rica tortilla , tienes sus recomendados del mes sus especiales americano, napolitano y el riquísimo de peceto con papas.. Volveré por el de crudo , el patagónico y el mediterráneo. Super recomiendo conocer este lindo lugar , un verdadero bar notable !!
Excelente lugar para ir a almorzar o merendar.
Unos sándwiches que te rompen el paladar de lo Rico, mucha varrieweed y abundantes que incluso son para compartir.
Vayan con tiempo y con pocas cosas en la mano xq el lugar es chico y la barra no tiene lugar para dejar mochila o abrigos.
Espectacular lugar / clima / atención y por sobre todo la comida
Mi primera parada de brunch en CABA. Fue genial haber ido a un lugar que te transporta en el tiempo. La comida deliciosa y el ambiente vintage fue único para darnos la bienvenida a la ciudad. El servicio y la calidad de todo estuvo genial. Si tuviera que exigirme a buscar algo “malo” sería que las sillas son un poco incómodas y para gente de piernas largas como yo, es un poco incómodo sentarse sin espacio en donde meter la rodillas porque hay un muro allí. De resto, la experiencia es única y nostálgica. Recomendado.
El lugar en si ya vale la pena visitar, tiene dos barras largas con sillas altas, que son la única opción para comer ahí. Los platos cuando salen de la cocina los deslizan por el largo mostrador, lo cual es todo un show.
La especialidad son los sándwiches, hay mucha variedad, fríos y calientes.
Comí el sándwich de milanesa Patagónico, es riquísimo y muy abundante. Incluye una buena guarnición de papas fritas.
Fuimos a probar los sándwiches, es conocido por eso y la particular forma de entregar los platos 😂 el espacio es chico, es una barra con asientos que no podes mover, un poco incómodo para comer. Fuimos a las 12, estaba casi lleno, el pedido llegó rápido. Las empanadas tienen un tamaño grande, con una alcanza! La de carne estaba rica. El sandwich de milanesa estaba rico también y el tostado americano también! Los tostados rondan $2400, sanwiches $3000 aprox.
Buena y novedosa experiencia, una vez que está listo el pedido, el encargado lo lanza a través del mesón de vidrio, pasan y pasan platos en frente tuyo, es casi gracioso. La comida y bebestible de calidad. Destaco la rapidez y preocupación del personal que atiende. Volvería
Más que un almuerzo al paso, una experiencia cultural y gastronómica. Platos que se deslizan por la barra, un clima de bar de tapas madrileño y el escenario de alguna escena de "Argentina 1985". Los mejores sandwiches en pleno centro porteño. Imperdible el de tortilla y un clásico el de peceto. Volveremos por el de crudo y el patagónico.
Excelente todo, desde la atención, la comida y el precio. Para almorzar o merendar de buena manera. Un lugar clásico donde se hacen bien las cosas.
Clásico por sus sándwich que no fallán. Vale mucho la pena. Me pedí un Mediterráneo de crudo. Exquisito!!!
Llegamos y había fila para ingresar, fue súper rápido!
Lugar atractivo por su ambientación. El lugar es angosto, se consume en barras.
La atención fue rápida y muy buena.
La carta tiene variedad de sándwiches gourmet, empanadas y tartas.
Los precios son moderados.
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