Panadería La Europea

Impecable el servicio de la señora que atiende las mesas, súper amable y hace su trabajo perfecto! Ideal para sentarse a tomar un café o almorzar algo. Me recordó a los viejos bares porteños.

El viernes compré sandwiches triples q no estaban húmedos, las masas durísimas y viejas una torta de tiramisú que estaba buena. Sino venden porq todo está caro menos lo harán vendiendo la merca vieja!!! Que decepción me sentí estafada,la cosa no está como para tirar la comida!!!!

Fui una vez hace unos meses a comer una porción de tarta de jamón y queso. De eso no me quedaron fotos, pero la porción era monstruosa y muy rica. Lo único que tengo para criticar es que se vuelve un poco seca, pero está muy buena realmente. Ese mismo día, tampoco tengo fotos de esto, mi mamá comió una porción de tarta de choclo y dijo que estaba exquisita. Esa sí es bastante más ligera por la salsa blanca. Hoy, de esto sí tengo fotos, pedí dos porciones de tarta de verdura para almorzar y están MEJOR todavía que la de jamón y queso y la de choclo. Bah, creo que, hasta ahora, es la variedad más rica en mi opinión. No tengo idea de cómo serán las cosas dulces, pero si querés un buen pedazo de tarta, no busques más. Es acá.

Llevé una torta de frutos rojos y mousse de chocolate que parecía recién hecha de lo fresca que estaba. Me sorprendió la gran variedad de cosas que tienen y se nota que todo es casero y de calidad. Además de la panadería cuentan con servicio de bar.

Si hay lugares clásicos y tradicionales en Córdoba, sin dudas, este es uno de ellos... Y me declaro fan de la barra del mismo, un lugar sumamente agradable para disfrutar de lo que se esté consumiendo junto a una vista activa de 9 de Julio, a la q suma mucho más puntos las santas ritas florecidas, un bello toque visual (en un momento se levantó un viento q se llevó muchas de sus flores-en realidad, hojas modificadas, la flor es chiquita y surge entre las misma- daba la impresión de una sutil nevada -ventisca- de pétalos). El lugar tiene un toque popular, clásico q distingue un toque sugerente a lo formal y casi pintoresco, a la vez q modesto... mezclando la vida activa de la panadería, con un espacio pequeño pero confortable para consumir en el local. La atención rápida y cordial. Lugar aseado. Los precios: esperables, un término medio. Los productos: caseros y placibles. De hecho yo consumí una gaseosa (hacía mucho calor, si no me inclinaba por un café con leche) junto a un fosforito de Roquefort (es un producto q conjunta lo dulce y lo salado, se podría decir) un producto que solemos comprar cómo un clásico para las fiestas, junto al de jamón y queso. Puedo afirmar q hace años, en distintos momentos, hemos compramos productos, q existe una amplia variedad y el deleite está asegurado en muchos (recomiendo los sandwiches de miga de espárragos, pavita y escabeche de pollo; y totalmente el pan dulce de frutos secos q hacen para fin de año). Es decir, las opciones y experiencias son muchas, y generalmente una garantía de buen puerto. Dado a la diversidad, calidad y trayectoria le doy cuatro estrellas, creo q jamás podría darle menos. No son 5 ya q en el pasado la atención no siempre fue la ideal, quizás eran días muy movidos, sin embargo, estoy satisfecha con la atención atenta de la señora encargada de salón de está última vez q asistí.