Otro bar notable que destaca por su cocina. No me canso de pedir y disfrutar de todo lo que ofrece. Tiene ese destello de gran bodegón. Lo que no puedo concebir es el estado de los baños. No solo viven sucios sino rotos. Años de abandono. Hasta cuando?
Se come riquísimo, Fuimos tipo 15 hs y nos atendieron muy rápido. El lugar es hermoso y se nota como mantienen la estética que tenía antes. Seguro voy a volver. Recomiendo mucho las empanadas de carne fritas. No se van a arrepentir.
La comida fue muy buena, abundante y a buen precio. La carta tiene muchas opciones que nos dieron ganas de probar. Sin embargo, los baños estaban bastante sucios y la atención por parte del mozo empezó bien, muy amable, pero se demoraron bastante en traernos la comida, y luego en levantarnos los platos y traernos la cuenta. Teníamos ganas de comer postre pero tardaron tanto que fuimos a otro lugar.
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