Eugenia Albornoz Beneito
+5
Espectacular el lugar, la atención, la comida ..... todo. Bellisimo y sumamente grato! Recomendable 100%
Maribel Bermudez de Castro
+5
Nos recomendaron este lugar para comer por sus bellas vistas y la calidad de su comida.
Superó nuestras expectativas con creces.
El servicio perfecto, la comida muy rica y muy cuidada la presentación de los platos.
Comimos en la terraza, con unas maravillosas vistas a las montañas.
Gracias por la sugerencia, muy recomendable.
Nos hospedamos 2 noches. De domingo a Martes. El lugar hermoso, Leandro no tomó la reserva y nos aconsejó cenar allí. La comida deliciosa y sus desayunos también. La atención de su personal super cariñosa. Me sentí como en casa. Quiero agradecer especialmente a Martin, dueño que se preocupa por que uno tenga una excelente experiencia. Gracias!!
Hermoso el lugar, impecable todo. Precios muy bien! El agua en jarra que sirven es riquisima! Hay lugar para estacionar, poca demora en la comida, deliciosos los platos. Tienen sillita para bebes y venden productos naturales de cosmetica que estab bastante buenos! Aceptan débito. Volvería a ir muchas mas veces! Soñado
El hotel es hermoso! Una casona antigua y acogedora. El lugar es muy tranquilo, ideal para ir a desenchufar. El servicio y su gastronomía excelente. Sin dudas volvería
Fuimos a cenar en tres oportunidades y cada experiencia supera a la anterior. Es excelente él personal, la comida, el servicio, el ambiente.
Siempre que visitamos la Cumbre vamos a La Fonfa
Excelente lugar! La comida muy rica, la atención 10 puntos! Vale la pena sin dudas!
El lugar es precioso, la comida y la atención de los chicos excelente.
Se debe tener en cuenta que hay que subir escaleras. Me encantó
Fuimos a almorzar al restaurante, nos dieron una visita pequeña por el lugar, tiene una cava pequeña, muy linda... relación precio calidad excelente, muy lindo lugar, tiene estacionamiento, se puede pagar con débito, recomendable
Hermosa residencia, dimos una vuelta por las instalaciones con una guía amorosa. Es una construcción de 1926 hermosamente refuncionalizada. El restaurante (recomendable hacer reserva) fantástico, todo lindo, la atención y los platos exquisitos. Recomiendo lo que probamos, de entrada una tortilla con morrones, plato principal sorrentinos con albahaca,ajo y queso, de postre unas frutas de estación salteadas con manteca y cognac. Se puede pedir vino en copa si solo uno bebé y una botella es mucho. Todo agradable. No ir apurado, la comida se demora y se aprovecha el tiempo con la visita. Vale realmente la pena, sin desperdicio.
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