Bodegón Italiano trabajado por sus dueños. Las pastas, en general, se preparan en el momento. Se hace notar la calidad de los productos que utilizan para los platos que ofrecen. Precio/calidad
Un placer que hayan reabierto. Una caricia al corazon (y a la panza). Los fussilli una locura. Mirta y su atención y su amabilidad infinita. Il Vero no debe cerrar nunca. Como le dije a unos amigos: salí de allí y amé más aun a Buenos Aires.
La comida es deliciosa, digna de una fonda a la italiana con todos sus detalles. Pedí unos raviolones de ternera con tuco y pesto, y vinieron al dente. Como debe ser y no siempre ocurre. La atención, magnífica, rápida, atenta y sin exceso. Fui con cuatro amigos, pedimos entrada, plato principal, postre, vino y cerveza, gastamos $400 por persona. Hay tanto pastas como carnes de caza silvestre. Recomiendo probar la burrata de entrada, que aquí se sirve fría.
Muy buena atención, cordialidad, y cibo muy bueno
Porque voy desde hace más de 10 años y las pastas caseras son riquísimas.
Reabrió con nuevos dueños. Todo lo que probamos hasta ahora exquisito. Platos muy abundantes y de buena calidad. Un clásico bodegón de barrio para no perdérselo!
Probamos unos ñoquis que estaban 10 puntos. El precio es elevado pero las porciones son abundantes (aunque no para compartir). Lo atiende una chica y el cocinero, lo que lo hace un clima muy familiar. La zona alrededor no está muy buena, pero vale la pena ir. Música italiana, fotos, todo muy bueno.
Pablo Ariel Stanganelli
+4
muy bueno todo, los precios acorde a la calidad de los platos, el menú es más sencillo que el de antes que era mas italiano. Una en contra cobran servicio de mesa. Una buena se puede pagar con tarjetas, salvo maestro. Recomendable, pero si conociste la vieja época no es lo mismo.
Es un lugar para volver siempre!!! Atención perfecta, ambiente cálido y familiar, la comida riquísima y porciones perfectas. Fuimos un 25 de mayo y estábamos antojados de tortas fritas ya que no había nos obsequiaron dos pastelitos que estaban bárbaros, en el momento que nos estamos retirando aparece el cocinero con una porción de tortas fritas recién hechas para nosotros.
Son de esos lugares donde da gusto ir a comer y a pasar un buen rato, gracias por la buena atención.
SUPER RECOMENDABLE!!!!
Auténtica cantina italiana para comer pastas caseras y conversar con amigos y/o familia. Vera música italiana, agradable, festiva, tradicional. Cordiales, atentos. Hay tarjetas pero también ofrecen 10% de descuento por pago en efectivo. Postres tradicionales. Es para pasarla bien e ir con tiempo. No es para ir apurados. El lugar está ubicado en una esquina de barrio.
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