Excelente atención! Súper rápida la
comida y hecha en el
momento! Exquisito el abadejo vasco y la brótola al roquefort. Pedimos Rabas de entrada y no nos quedó espacio para el postre. No es económico pero vale la pena la salida.
Nos habían asignado una mesa que estaba en una de las esquinas rodeados de paredes y otras mesas, espacio diminuto e incomodo. Entendieron enseguida que no era un lugar adecuado para comer (no entrabamos!) y nos buscaron otra mesa.
De entrada pedimos vieyras gratinadas ($4200),muy ricas! Luego langostinos grillados con panceta y papas ($6200) y el plato del día que eran Trillas fritas con papas natural ($ 4000). Carta de vinos discreta con precios un poco altos, pero se consigue alguno bueno a precio mas acorde.
Mozos de oficio atentos, al igual que la recepcionista.
Buena distribución de las mesas, salvo la que nos tocó a nosotros.
Salon un poco ruidoso, reservar siempre.
Comimos muy buen, repetiremos la experiencia!
Si vas a cenar fin de semana conviene ir con reserva previa ya que es bastante concurrido. Los precios me parecieron algo elevados. Los platos tienen tamaños generosos. Probe el abadejo al roquefort que estaba bien, suave y rico el pure de papas gratinado, le faltaba algo de sabor. El arroz con mariscos, buen tamaño para compartir, lleno de mariscos pero para mi gusto le faltaba algo de sabor. Servicio correcto.
An error has occurred! Please try again in a few minutes