Fuimos a cenar y nos encontramos con un lugar genial. Buena música, ambiente relajado. La atención súper amable. La comida riquísima, casera y abundante. Los precios muy accesibles. Es súper recomendable para ir a conocer y disfrutar. Además, si el clima lo permite, tienen un patio hermoso en el bosque.
Excelente comida, pedimos parrillada para dos, papas fritas, un vino y dos aguas. Total $2590.
Ahora la crítica. El lugar simple pero bonito afuera, mesa sin lujos entre los árboles. La tira de asado normal, el vacio majestuoso, doa empanadas de carne bien ahí, las papas muy ricas, chori normal y morcilla muy rica. Asi que en general muy bien. El costo total medio que asusta, mas cuando esto es sin factura, apenas un papelito. Eso asusta más ... el vino de autor recomendado muy bueno, $700. Lo unico no tan bueno es el servicio, a veces la buena onda y simpatia no vienen con un servicio atento. Pedimos varias veces cenicero, al rato largo nos trajeron dos. Para pedir la cuenta tuve que esperar minimo 20 minutos porque no aparecía nadie. Pedimos chimichurri y nos trajeron aceite de oliva saborizado ...sin el vino salió $945 x pera.
Todo excelente. La atención, las berenjenas al escabeche suaves, muy ricas empanadas de carne cortadas a cuchillo y el vacío super tierno. Volveremos
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