Un lugar muy especial, ameno y agradable para almorzar o cenar.
De las mejores opciones en El Calafate; cerca del centro y a precios razonables.
Comida casera de gran calidad, especialmente sus pastas.
Excelente atención de Abi y Carlos, quiénes nos hicieron sentir como en casa.
Además, muy ricas las limonadas que también preparó Carlos.
Por último, la energía del espacio y su historia es conmovedora. Si quieren saber más, no dejen de visitarlo.
Hermoso lugar. Los platos increíbles, muy ricos y abundantes. Muy buena relación precio calidad. La atención buenísima. Hubo música en vivo y un ambiente muy lindo.
Muy amables y muy buen servicio. La comida un lujo y abundante .
Martin Hernan Lamónica
+5
Muy buenos platos. Abundantes y muy sabrosos. Muy recomendable.
Excelente atención porque llegamos sin reserva y nos armaron mesa para 6. Se ganaron un cliente frecuente por la buena onda.
Recomiendo el lomo torneado y la copa Kambá 👏🏻👏🏻👏🏻👏🏻👏🏻👏🏻
Lindo lugar ,confortable, comimos sorrentinos pero la salsa se cobra aparte . Muy rica la comida . Se cobra cubierto.
Compramos empanadas para llevar a excursión del día siguiente y las cobraron como si las consumieron en el lugar.
Excelente lugar con exquisitas comidas, altamente recomendable. La chef, inigualable!!!
Buen lugar..en mi caso pedimos lomo con ensalada y bondiola rellena con salsa de frutos rojos y una papa rellena, y ambos platos muy abundantes. El Resto está bien ubicado, y tiene cerveza artesanal, lo cual para mí le suma un punto extra.
Fuimos a comer al medio día, y a pesar de que nos habían dicho que era un Restó de mariscos y pescados, no había mariscos.
La cocina es un espectáculo, tanto como la atención, impresionante. Los platos super abundantes. Más que recomendado, y un lugar al que seguiría volviendo una y otra vez.
Excelente todo, platos deliciosos, buenos precios para los costos de El Calafate, la atención excelente.
Recomiendo tabla de mariscos, sorrentinos de cordero con salsa de hongos y volcán de chocolate con helado.
Me sorprendió positivamente, por el aspecto de afuera parece simplemente una pizzería pero por dentro es otro mundo muy distinto. Una fuente en la entrada, un salón muy amplio con un hermoso mural en el techo. La comida es casera, los ñoquis parecen de nubes ya que al meterlos en la boca se desarman, sinceramente jamás probe algo asi. La atención fueron excelentes, muy recomendables.
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