El ambiente muy tranquilo, y las meseras agradables y atienden rápido. La comida muy rica con porciones generosas y precios acordes. Nada más cobran los cubiertos y al menos nosotros, no vimos algún aviso.
Bonito espacio gastronómico en una esquina magnífica de Palermo ,su ambientación es muy agradable y pintoresca , la vajilla de lata me parece encantadora y me remonta a mis años de infancia .Destaco el plato de papas con morcilla y los postres en especial el flan completo y super bien presentado ,como los panqueques de dulce de leche .
Con respecto a la atención del personal es muy amable y cordial ,siempre atentos al cliente.
Agradezco profundamente la atención de Eduardo todo un gran profesional ,la camarera Candela ,no estoy muy segura de su nombre.
Sin dudas volveremos pronto .
Fuimos a probar varios platos chicos. Algunos de ellos se pueden compartir, otros son para una sola persona. La atencion es impecable. Siempre atentos a a cualquier necesidad. El lugar es lindo. Bien decorado. Los platos que pedimos, estuvieron muy bien. Prueben la provoleta y el bife de chorizo.
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