Un lugar escondido en constitución, pedimos un menú de 4 pasos y uno de 3 pasos. Las entradas vol au vent de pollo y champiñones y la terrina de pescado exquisitos, los platos principales boeuf bourguiñon y el conejo a la mostaza muy pero muy ricos. La atención súper bien y todo muy rápido. La relación precio calidad es muy buena. Vayan a probar vale la pena
En un maravilloso edificio de 1920 con decoración original y lleno de recuerdos de los ex combatientes franceses de las 2 guerras mundiales, se comen exquisitos platos franceses. Imperdibles la sopa de cebolla y el conejo a la mostaza
El interior está muy bien mantenido, es pintoresco.
La recepcionista muy distraída, nos tubo un buen rato en la recepción, llegamos con reserva y si no le preguntaba si podíamos ingresar, aún estaríamos esperando.
La comida en su punto, sabrosa, los postres bien logrados.
El menú es acotado.
Los baños limpios, no cuenta con espacio para discapacitados.
Es muy importante que tengan en cuenta que la zona en donde se encuentra el restaurante es bastante peligrosa. No apto para ir con niños ni con personas mayores, hay que estar muy atentos hasta que se ingresa al restaurante.
Es un sitio que vale la pena conocer, pero al cual no volvería.
An error has occurred! Please try again in a few minutes