No tengo palabras para explicar lo RICO, DELICIOSO, SABROSO que comí! Muy rico, todo!! Espectacular… lo súper recomiendo. OJO, es caro! No es barato… yo gaste 25mil pesos argentinos sin propina para dos personas. Pero, lo vale? SI!!! Lo pagaría otra vez sin duda. Me quede con ganas de probar toda la carta.
Un lugar excelente con una atención super destacable. Las pastas son realmente geniales, y no te das cuenta que estan elaborada sin gluten. Los postres también son muy buenos. No es barato, pero tampoco es excesivo. El único punto débil es que no aceptan reservas y podes esperar un buen rato para sentarte. Muy recomendable
Una experiencia placentera desde todo punto de vista. La calidad de atención, lo riquísimo de la comida. Materia prima de primera. Y todo gluten free. Volvemos siempre !! 😀👌
Desde el momento en que llegamos nos sentimos súper bien atendidos. Todo el personal es muy amable y con muy buena onda.
La comida es de otro planeta: si sos celíaco/a como yo o vas con una persona con una persona celíaca, realmente la vas a pasar muy bien.
Compartimos de entrada Arancinis con un relleno de carne y queso y de plato principal ravioles con estofado de osobuco. Los postres tenían mucha pinta pero realmente no nos entraba más comida. ¡Todo muy abundante!
Fuimos con mi esposo y quedamos encantados. El precio lo vale porque es una experiencia única y la comida es de excelente calidad.
Delicioso todo. Quizás algunos platos quedas con gusto a poco en cantidad, pero depende de cuál elijas. Hermoso encontrar un lugar para comer pasta y focaccia sin gluten, y muy muy rico. Recomiendo
Excelente experiencia, todo muy rico
Los precios un poco elevados. Pero vale ir aunque sea por una ves! Recomiendo el sándwich de milanesa y las croquetas de arroz,arvejas y ragu
Maria Florencia Casati
+5
La verdad fue TODO LO QUE ESPERABA! Riquísimo lo que comimos, muy buen lugar y servicio. Súper recomendable, si sos celíaco , intolerante al gluten o simplemente queres hacer feliz a alguien que lo sea , tenes que ir! Es un MUST ♥️
Lo tenía un poco romantizado, de visitas de años anteriores -donde lo que hoy ya es una cadena- era un poco más artesanal, de más generosidad en las porciones, y en general el lugar transmitía algo un poco más cercano a su creador, por eso van 4 y no 5 estrellas en algunos rubros. La focaccia con la que te reciben se redujo a una pequeña porcion por persona. No obstante la pasta sigue siendo de excelente calidad, tanto en los platos como en las sugerencias del día, muy bien explicados por el personal. Detalle a destacar: el local está, aún de día, muy a la sombra; con lo que sí alguien sufre de frío o se encuentra desabrigado, se reparten ponchos gentileza de la casa.
Los precios de los platos son razonables, vinos un poquito más arriba.
La comida estuvo riquísima. Solo mí hija es celiaca, el resto de la familia comimos allí y lo disfrutamos.
Los Ravioles de carne de cordero eran deliciosos.
La focaccia home made también muy rica.
Muy recomendable este lugar!
Mí experiencia fue en una merienda con amigos, en la que no planificamos para nada ir ahí y tuvimos la suerte de encontrar lugar.
Las opciones de merienda que pedimos estaban muy bien, tanto en cantidad como en sabor.
La atención fue la pata más floja, ya que de las 6 cosas que pedimos, le erraron a 2. Sumado a que no nos quisieron dar una mesa donde entrábamos bien porque "estaba reservada para cenas", y al final se sentaron los mozos a comer (todo bien que coman, pero no nos mientan)
El ambiente es muy lindo y acogedor (inclusive en la vereda) pero algo chico para lo que se espera del lugar.
En resumen, me gustó🤓!
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