Un lugar pintoresco, limpio y familiar. La atención es excelente, los productos son muy buenos y los precios son accesibles. Recomendado.
Muy pintoresco, es como un viaje al pasado el lugar tiene el mobiliario y la decoración de cuarenta años atrás también el personal es de aquella época y equipamiento gastronomico. Como resultado se puede y llevar una buena experiencia recordando los sabores de antes y la atención de otro tiempo. Muy
Gran lugar. Tengan en cuenta que el menú puede variar a último momento. Igualmente no decepcionará. La cerveza barata y rica. Los platos muy abundantes y siempre hay conciertos los viernes.
Hay pocos cocineros por los que me dan ganas de cruzar la capital federal para comer sus platos y uno de ellos es Javier Vargas Lira. Desde la entrada, pasando por el principal y ni hablar del postre, todos manjares y a un precio excelente. Gracias por una cena increíble como siempre!!
Comida casera y muy rica que combina con un ambiente muy bien decorado calido y con buena musica en vivo. Atendido por sus dueños con muy buena onda. Lo recomiendo y sin dudas volvería a disfrutar de una buena cena con mi pareja.
Pedí un sandwich de pernil, el cual decía que venía con zucchinis, cebolla caramelizada, mayonesa de ajo y escabeches; lo único que trajo fue la cebolla. Cuando le digo a la moza que faltaban dichas cosas, me dice que la cocina se olvidó de avisarle que no tenian los ingredientes. Para colmo la carn
Un bodegón bien bodegón. Comida casera hecha con amor, amor x la comida casera.
Si no hay algo en el menú, es xq se agotó! Usan productos frescos y de estación.
Si no te gusta, seguí yendo al Mc.
Lo visité varias veces, ambientación rústica con detalles vintange, atendido por sus dueños, la comida casera, riquisima!!! Precios accesibles y como si fuera poco, los viernes hay música en vivo con músicos de primera!
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