Probé varias entradas y platos, y todo estaba riquísimo.
Las albóndigas de entrada eran geniales. Podría haber comido un plato entero de eso.
De principal pedí la lasagna y me encantó. Todo súper sabroso, buenas combinación de sabores pero sin ser invasivo.
Tenían 4 opciones de platos del día adicional a la carta. Eso me pareció genial.
Los postres son simples, pero están ok.
Precios acordes a lo que ofrecen.
El lugar es simple pero muy bien ambientado. Muy bueno para ir con amigos o familia.
El servicio no es el mejor, la mesera parecía enojada y apurada, pero tampoco fue malo.
Como algo negativo diría que parece que te están apurando todo el tiempo para que te vayas, pero salvo eso todo estuvo muy bien.
No me canso de ir, todo muy bien logrado. Algunos platos pueden ser para compartir. Mi favorito es el arroz tipo paella 🥘🔥💯 Los postres bien clásicos, podrían hacer algo que esté a la par de sus platos principales.
Excelente experiencia. La comida riquísima, tienen gran cantidad de platos para vegetarianos y celiacos. Las opciones son bastante sofisticadas, no son platos que se ven en cualquier lugar. Si bien los precios son algo elevados, lo vale. La atención increíble, y todo llegó súper rápido.
Excelente experiencia almorzando. Precios altos pero acorde a la calidad.
Cabe destacar la entrada de cortesía, conserva de porotos. También tienen un minimercado de conservas para ofrecer.
Un 10 de 10 recomendado.
Es la primera vez que voy y me ha encantado la atención 20 puntos muy buena onda de todos los que trabajan allí desde la persona que nos atiende como de los cocineros que están a la visita, muy rico todo! Gastamos 69000 entre 5
Buenísimos los platos. Lo único que no me convenció fue el acompañamiento de lentejas para la pesca. Las pastas, de lo mejor! Compartimos para poder probar varias cosas porque todas las opciones se veían tentadoras. Los postres muy buenos también 👍🏻
Es un lugar que no falla. Lindo ambiente, buena atención, porciones abundantes y precios acordes a la calidad de la comida.
La carta es bastante acotada, pero esto garantiza que el servicio sea eficiente y rápido. También ofrecen algunas opciones fuera del menú.
Fuimos a cenar con reserva previa. De entrada probamos polenta frita y buñuelos de kimchi, que acompañamos con el vermut de la casa y un Campari. Seguimos con lasagna y paella como plato principal, y de postre pedimos mousse de chocolate. Todo muy rico y bien presentado.
Más que recomendable.
Lugar tranquilo y con onda donde se come súper rico.
Las pastas son de otro mundo, exquisitas.
La carta de vinos y el postre excelentes.
La atención de diez y el clima del lugar es súper agradable
Toda la comida es riquísima. Muy bien atendidos, el menú es variado y siempre tienen opciones fuera de la carta. La entrada y los platos principales muy buenos, el postre (tiramisu) no fue el mejor que comí, hay mejores. Recomiendo ir con reserva.
Comida: interesante propuesta al incorporar legumbres en varios acompañamientos de la carta, nosotros probamos de entrada una burrata con mortadela a la plancha que estaba bien sabrosa, de fondo Ravioles de Osobuco y Rigatoni con Estofado de Cordero, ambos platos bien sazonados y contundentes, buena textura en la masa y el relleno como la salsa bien equilibrados.
Servicio: son rápidos y atentos, explicativos y serviciales, buscan que entiendas lo que pides, así como que disfrutes la instancia con ellos.
Ambiente: tienen un buen espacio interior, el bar tiene su onda y la ambientación como la ventilación del lugar es muy buena, se aprecia la cocina, lo que le da un encanto distinto al lugar.
¡Es un must definitivo en BA!
El ambiente es bueno, el servicio súper atento y rápido (depende de la hora y afluencia, obvio).
Pero lo más más importante es la comida.
Todo lo que probamos estaba increíble, muy bien servido y a un precio adecuado.
La calidad de ingredientes y el sazón de los platillos se nota.
Recomiendo la polenta frita de entrada, la salsa está increíble. De platos fuertes nosotros nos fuimos por la milanesa de bife (10/10) y la lasaña vegetariana (10/10).
Si quieres tomar algo diferente, pide el vermut de la casa, está rico.
¡Volveremos siempre que vengamos a BA!
Nos encantó. Fuimos en Agosto de paseo con amigas. Almorzamos y tomamos unos aperitivos. Platos abundantes. Muy buena atención. Buenos precios. El lugar muy lindo.
Recomiendo.
Almorzamos en el interior del local, comimos canelones y ossobuco, realmente muy rico todo!!! En particular la carne estaba muy tierna y sabrosa, muy linda experiencia. Atención impecable, la única cosa negativa fue la ubicación de la mesa muy cerca de la cocina, sin embargo la experiencia valió la pena.
Hermoso lugar para comer de diez, las porciones son super abundantes y los precios son accesibles, se puede pedir entrada, plato principal y postre, todo muy rico y abundante.
Estilo bodegon. La carta es variada y tienen opciones del día por fuera de la carta, incluso opciones vegetarianas. Pedimos una milanesa napolitana con papas y unos canelones de berenjena con una salsa de tomate y albahaca que estaban espectaculares, deliciosos. Dato no menor: el plato vino caliente. Las porciones son abundantes y se come muy muy bien. Precios acorde a la calidad y el servicio. Fuimos con reserva que sacamos ese mismo día. Nos atendieron bien y la comida la sirvieron rápido. De postre pedimos un flan con dulce de leche y un tiramisú. Muy rico ambos.
Nos gustó mucho, pasamos una linda noche y sin dudas lo recomendamos.
Desde hace tiempo queria venir a comer a este lugar y mis expectativas fueron superadas. Reservé por whatsaap y fueron muy atentos. Pedimos una entrada de brusqueta de foccacia, mostaza tipo alemana, pepinos en conserva y pastrón, una combinación exquisita y lo acompañamos con un vermuth. Plato principal: raviolón de osobuco con salsa pomodoro y polvo de alcaparras y unos canelones de ricota y berenjena ahumada y salsa de tomate..excelente! y de postre un canoli relleno de helado de ricota con cascaritas de naranja y baño de chocolate. Un placer comer comida casera, creativa con un servicio de primera.
Lugar muy familiar, con ambiente súper relajado.
La atención es muy buena, súper atentos.
La carta es bastante acotada y con sabores no tradicionales.
Los platos son abundantes, muy sabrosos.
Precios regulares.
Las opciones de postres son tres, realmente muy reducido y no eran de lo más rico.
Hay que reservar para conseguir mesa dentro.
Es una gran opción de calidad en la zona si vas para la feria.
La comida es riquísima y sabrosa, bien preparada y pensada. Platos de chefs.
Pedimos burrata de entrada que estaba muy buena y luego pastas. Recomiendo ambos.
El único inconveniente es que el lugar queda chico para la cantidad de gente (vayan temprano porque si no hay que esperar), y el baño ridículamente chico.
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