Sofia Ibarborde
Excelente! Se come exquisito y es un lugar muy íntimo ❣️
Lionel Lerner
Muy rico, muy buena la atención, precios razonables. Los ravioli de salmón con crema de champignones y camarones estaba espectacular, los panes que sirven en la mesa deliciosos.
seelvana baylac
Muy buena la carta y riquísimos los postres. Muy agradable el ambiente.
ANdrés López
La comida es excelente.
El servicio es atento, cálido y profesional.
La distancia entre las mesas es generosa y permite tener cierta intimidad.
La acústica es óptima.
Tiene una estética original y bella.
Se puede visualizar la cocina, el esmero y pulcritud con la que se trabaja.
La relación precio calidad es insuperable.
IMPRESCINDIBLE CONOCERLO
Enrique Moya
Menú del mediodía buena relación precio producto. No funcionaba la calefacción Mucho frío dentro del local. Sin Menú libre de gluten
Juan Manuel García Carral
Tenía muchas ganas de que me guste esté lugar. Tiene ya muchos años de actividad y cuando era más chico las dos manos gigantes que abren el telon de material me parecían que le daba un toque de originalidad y misterio. Pero por una razón u otra nunca cené ahí hasta ayer. El lugar por dentro es muy hermoso. El patio cubierto con el árbol interno es acogedor. Las estructura de hierro y el color blanco el dan un aire especial. Pero el tema es la comida. La verdad que no es esta a la altura del lugar (y un poco fuera de precio por lo que termináis cenando). Comida tibia y con poco gusto. Puede que fuera una mala noche....casi no había gente. Lamento que no me gustara...pero no me dio ganas de volver.
Mario Engel
Mala atención... para que se acercara la camarera había que hacerle señas a la gente de la mesa del fondo para que le avise. Para salir tuvimos que sacar la mano por la reja y tocar el timbre.
Hubo un incidente con un chico de la calle que entró, un comensal se puso nervioso y lo sacó. Nadie del restaurante se acercó.
Nuestros platos vinieron quemados en distintos grados. Nunca nos pidieron disculpas. Del café de atención... olvidate.
No volveremos!
Patricia Vazquez Soria
es un restaurante, no una parrilla. El aún Rojo no estaba en su Punto. Al mediodía es silencioso, casi vacío, tranquilo para un almuerzo de trabajo. El postre estaba congelado aún. No me sorprendió la comida y el precio eleva la espectativa.
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