Opiniones Dandy Bar & Grill

Excelente ubicación, bien atendido, tiene variedad de platos, buena relación precio calidad, sin embargo creo que carece de ambiente, no tiene alma. Todo lo demás muy bien. Recomendable.

Fuimos a las 13:50, la comida llego rápido. Pero, pedí una ensalada Cesar y otra ensalada Ursula, y se confundieron, nos trajeron dos Cesar, igualmente cambiarlo no fue un problema pero molesta un poco. Otra cosa, es que pedimos un vermouth y el trago lo trajeron literal a lo último, tipo ya habíamos terminado de comer y nos habían retirado los platos. Lo gracioso, es que nos preguntaron como 3 veces lo que estábamos pidiendo y aún así se confundieron con la bebida y llego tarde. La comida en general estaba muy rica, la limonada de menta y jengibre era un 10.

Me encanta Dandy de Libertador El ambiente. La comida . Los desayunos . Es muy agradable. Tanto en invierno como en verano . Y sobre todo en primavera .

Desde que llegamos al establecimiento hasta que nos retiramos fuimos atendidos de una forma muy cálida por todo el personal del local! Éramos un grupo grande, nos guiaron hasta nuestra mesa y el mozo Jorge nos atendió de forma personalizada a cada uno, asesorándonos ya que era nuestra primera vez en dandy, tambien cada 15 minutos aproximadamente pasaba por nuestra mesa a consultarnos si necesitábamos algo, súper predispuesto a pesar de que el lugar estaba lleno! Me voy muy contento con el servicio, la calidad de la comida es excelente, una de las mejores ribs que probé LEJOS . Definitivamente uno de los lugares que tenes que visitar si estas de paso por Buenos Aires!

Título: Un festín culinario con Jorge como anfitrión excepcional Reseña: Adentrarse en el universo gastronómico de Dandy es mucho más que disfrutar de una exquisita comida, es un viaje de los sentidos donde la atención y el servicio se convierten en estrellas de la velada. Provoleta: Un abrazo de queso derretido La velada comenzó con un abrebocas irresistible: la provoleta. Un queso provolone fundido hasta alcanzar ese punto perfecto de cremosidad, servido con un toque de tomates y rucula. El queso se derretía en la boca, liberando su sabor intenso y cautivador. Pero lo que realmente hizo que este plato destacara fue la atención de Jorge, quien nos guió con entusiasmo en la forma adecuada de disfrutar de la provoleta. Lomo Salteado en Zetas: Un viaje a la tierra de los sabores El lomo salteado en zetas fue el plato principal que nos dejó sin aliento. Trozos de lomo de res tiernos y jugosos se mezclaban con una selección de hongos silvestres, creando una sinfonía de sabores que nos transportaba a un bosque encantado. Los hongos, con su textura y sabor únicos, se unían en perfecta armonía con la carne, mientras que la salsa elaborada por el chef nos hacía sentir como si estuviéramos explorando los rincones más profundos de la naturaleza a través de cada bocado. Jorge, nuestro atento anfitrión, se aseguró de que cada detalle estuviera perfectamente coordinado, desde la temperatura de la carne hasta el maridaje con el vino, elevando así la experiencia gastronómica a un nivel superior. Flan: El dulce final con toque casero El cierre de esta experiencia culinaria estuvo a cargo de un clásico postre argentino: el flan. La suavidad del flan, acompañada de su caramelo dorado y una porcion de crema, nos llenó de nostalgia y satisfacción. Jorge, siempre atento a nuestras preferencias, se aseguró de que el postre se sirviera a la temperatura perfecta, realzando así su sabor y textura. Cada cucharada nos recordaba la importancia de terminar una comida con un toque dulce y reconfortante. Pero lo que realmente hizo que esta experiencia culinaria fuera inolvidable fue la atención de Jorge como anfitrión. A pesar de no ser el chef detrás de los platos, su pasión por la comida y su deseo de hacer que cada comensal se sienta especial eran evidentes en cada interacción. En resumen, cenar en compañía de Jorge es una experiencia que va más allá de lo gastronómico. Es un viaje sensorial donde la atención y el servicio se unen para crear momentos mágicos en torno a la mesa. La próxima vez que desees explorar los sabores argentinos con un toque especial, busca a Jorge como tu anfitrión y prepárate para ser transportado a un mundo de delicias culinarias y hospitalidad excepcional.